Dieta macrobiótica
Información y propiedades de la dieta macrobiótica y sus efectos para la salud.
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7/9/2025 ― La dieta macrobiótica viene a ser una forma extrema del vegetarianismo combinada con ideas pertenecientes a la filosofía Zen budista.
Principios básicos de la dieta macrobiótica
Hay que atravesar diez niveles en la dieta de restricción dietética hasta llegar a alimentarse sólo de cereales.
Esta dieta clasifica a los alimentos en dos categorías, los conocidos como ying, o alimentos pasivos -almejas, patatas, ciruelas, vitaminas hidrosolubles-, y los denominados yang o alimentos activos -huevo, cerdo, vitamina B6, vitaminas liposolubles-.
La dieta macrobiótica parte de la base de que debe existir un equilibrio entre los alimentos ying y yang para lograr la salud, prometiendo equilibrar los puntos energéticos en el organismo, logrando una mayor armonía entre los niveles psíquicos, físicos y espirituales.
El sistema macrobiótico consiste en una serie de dietas que se numeran de -3 a +7. Las 5 primeras (-3 a +2) incluyen cantidades decrecientes de alimentos de origen animal, son prácticamente dietas vegetarianas.
Consejos y pautas de la alimentación macrobiótica
Las restantes dietas macrobióticas son exclusivamente vegetarianas y contienen cantidades crecientes de granos de trigo hasta llegar a la dieta 7, que se compone exclusivamente de granos de cereales triturados. Este sistema aconseja una limitación de agua en la bebida.
Una dieta macrobiótica típica estaría compuesta por 50-60% de granos de cereales, 20-25% de vegetales, 5-10% de legumbres y 5% de sopas, además de una proporción variable de algas marinas.
Por todo ello, el consumo de una dieta macrobiótica puede conducir a una deficiencia proteica -aporte de proteínas de bajo valor biológico- y a una importante carencia en vitaminas B12, C, A y D.
Algunas ideas para el menú dieta macrobiótica
Un menú de proteína vegetal -seitán, tofu-. Como postre, compota de manzana natural o una taza de té. Para merendar un té con galletas de arroz con mermelada o paté vegetal. Y para cenar, sopa con verduras y hongos japoneses, y verduras al vapor, té o un trozo de pastel.
Inconvenientes de la dieta macrobiótica
La llamada dieta macrobiótica ha sido presentada durante años como una filosofía de vida que busca el equilibrio entre cuerpo y mente a través de la alimentación. Sin embargo, detrás de esa imagen aparentemente saludable, se esconden riesgos importantes para la salud que conviene analizar con seriedad.
Uno de los principales inconvenientes es que se trata de una dieta restrictiva y desequilibrada. La macrobiótica suele basarse en un consumo casi exclusivo de cereales integrales, legumbres y algunas verduras, mientras que limita drásticamente alimentos esenciales como las frutas variadas, los lácteos, la carne, el pescado e incluso en algunos casos el agua potable. Esta falta de diversidad alimentaria puede generar deficiencias nutricionales graves, sobre todo en proteínas de alta calidad, vitaminas como la B12, fundamental para el sistema nervioso, hierro, calcio o ácidos grasos esenciales.
Análisis desde un punto de vista saludable de la filosofía macrobiótica
Otro aspecto preocupante es que esta dieta, en sus versiones más estrictas, puede producir pérdida de masa muscular, anemia, problemas en la piel, caída del cabello, debilitamiento del sistema inmunológico y fatiga crónica. Estos efectos son particularmente peligrosos en niños, adolescentes, mujeres embarazadas y personas mayores, ya que son grupos con mayores necesidades nutricionales.
Además, la dieta macrobiótica se suele rodear de una especie de misticismo pseudocientífico, donde se asocian los alimentos con conceptos filosóficos de «yin y yang» más que con criterios médicos y científicos. Esta filosofía, aunque pueda resultar atractiva para algunos por su aire espiritual, carece de base científica sólida y puede llevar a decisiones equivocadas en la alimentación diaria.
A todo esto se suma que, al eliminar o reducir de manera radical alimentos básicos de la dieta mediterránea o de cualquier alimentación equilibrada, la macrobiótica puede convertirse en una alimentación típica de países con carencias, recordando en muchos casos a los patrones forzados de subsistencia en regiones empobrecidas del tercer mundo. Esto no es una elección saludable, sino una renuncia voluntaria a los beneficios de la nutrición variada que ofrece la sociedad actual.
Una recomendación:
Dieta Atkins ― Esta nueva forma de alimentarse y comer sin control fue creada por Atkins que aseguró que con esta dieta se podía adelgazar. Se basa principalmente en comer sólo proteínas sin nada de hidratos de carbono lo que la convierte en una dieta muy peligrosa por la carencia de azucares de disolución lenta que aportamos a nuestro organismo. Lo cierto es que el autor la practicó durante toda su vida y en los últimos años vimos cómo engordó y murió afectado por muchas carencias alimenticias.
609 - Conviene que lleves un registro de los alimentos que comes. Mantén un diario de tus comidas para realizar un seguimiento de la dieta.
♦ Unos apuntes ►
Los médicos y nutricionistas insisten en que quien se someta a una dieta macrobiótica debe hacerlo bajo un control médico frecuente, con análisis periódicos para detectar a tiempo cualquier deficiencia. Sin embargo, la recomendación más sensata es clara: ninguna persona racional debería seguir una dieta tan peligrosa y desequilibrada. Existen alternativas mucho más seguras y efectivas para cuidar la salud, como una dieta mediterránea, equilibrada, variada y respaldada por décadas de estudios científicos.
Por todo lo expuesto, aunque la dieta macrobiótica pueda sonar exótica o «espiritual», en realidad es un régimen restrictivo que pone en riesgo la salud en lugar de mejorarla. La alimentación no debe ser un experimento ni una moda, sino un pilar sólido de bienestar basado en el sentido común y en la ciencia.